sábado, 10 de enero de 2015

174. TRAVESÍA SIERRA GELADA, BENIDORM-L'ALBIR (8k, 500+)



Entre las costas plácidas de las zonas de Altea y de Benidorm se levanta una curiosa y pequeña montaña que cae a pico sobre el mar llamada Serra Gelada aunque difícilmente alcanzará nunca temperaturas bajo cero pero que le puede helar la sangre a más de uno si se mete en ella alegremente y sin prevención. Son ocho kilómetros de sube y baja por un sendero al borde de los acantilados que en verano seguro que son todo un suplicio. El 23 de diciembre del 2014, sin embargo, fue un delicioso paseo únicamente alterado por la sorpresa de un continuo sube y baja que no esperábamos, y que al final nos deparó unos desniveles acumulados de 460+ y 600-. La fotografía de presentación está tomada desde el Puig Campana en una ascensión posterior de Josema y Teresa (4ene15) que algún día tendremos que hacer Rosalía y yo. Para hacer la travesía de Serra Gelada se necesitan obviamente dos coches, posibilidad que se nos ofreció en estas pasadas "prenavidades" al realizar la excursión con Teresa y Josema


Punto de salida, el final de la carretera que sube hasta la Creu, desde donde se tiene una de las vistas clásicas de Benidorm con el Puig Campana al fondo a la derecha. El track lo grabé en dos sesiones por agotamiento de la batería, así que he tenido que hacer un corta y pega para el último kilómetro.


Como decía, lo más importante de este recorrido es su perfil, en el que no he hecho corta y pega por la diferencia de escalas, así que hay que añadirle por el lado derecho un kilómetro más y otros 160 metros de descenso.


Aunque todo este sube y baja puede parecer un poco monótono, con las fotos nos hacemos mejor idea:


El sendero se inicia dejando la Creu de Benidorm a la derecha y transita por una ladera a la que no le daba el sol y que estaba completamente mojada y resbaladiza por el rocío.


Pasado ese pequeño barranquillo salimos a zona soleada y subimos alegremente hasta la primera cima marcada por un montón de piedras.



Miramos hacia "levante" y vemos en lontananza las antenas que marcan el punto más elevado de la sierra:


El sendero se aproxima entonces al borde de los acantilados ofreciendo unas espectaculares vistas hacia atrás:


...y... también hacia delante, porque hasta el final del recorrido va a seguir por el filo del mismo, al que... mejor no asomarse mucho.


Lo que no esperábamos es que las V del sendero fueran tan pronunciadas, y es que en el monte da siempre mucha rabia perder la altura que tanto te ha costado ganar


En los fondos de algunas de esas V el sendero entra en los pinares y amenaza con perderse o te despista con diversas variantes, pero en cuanto se sale de los pinos se vuelve a la única posibilidad. Lo que desmoraliza un poco es que según sales de los mismos las antenas del fondo parecen verse siempre igual de lejos que al principio.



Solo si miras hacia atrás te vas dando cuenta de la progresión por la acumulación de acantilados que vas dejando a la espalda:


Pasado el km 3 se llega a los restos de una especie de caseta en un alto desde la que se divisa el peñón de Ifach (foto con tele) y... desde donde las antenas parece que se ven algo más cerca.



Lo malo es que la siguiente V es la más dura de todas, casi una pared (véase foto anterior), aunque por suerte no muy larga.


Pasada esta última V el sendero se hace algo más llevadero hasta que finalmente acaba en la pequeña carretera que sube a las antenas.



Cinco y medio kms desde la salida y 2 horas 45 minutos empleados hicieron que decidiésemos que ya era hora de sentarnos a sacar los bocadillos. A Rosalía se le empañó un poco la lente del móvil y la foto salió algo borrosa, pero muy bonita también, con el Puig Campana y el Ponotx al fondo.


En esta otra puede verse a contraluz todo el recorrido y las puntitas de los rascacielos de Benidorm.

Hubo algunas dudas sobre el sendero que nos debería bajar a L'Albir. Como el "guía" no conocía muy bien el terreno y el sendero más cercano al mar parecía desdibujarse enseguida, tomamos el mucho más marcado que baja directo al pueblo aunque en algún momento también lo perdimos porque la línea más clara del terreno es la de los postes de la luz que sube a las antenas.


Eran cerca de las cuatro de la tarde (de un 23 de diciembre) y a mitad de la bajada nos cruzamos con un grupito de gente madura que subía alegremente y que nos preguntaron si faltaba mucho hasta Benidorm... (!) hasta donde pensaban ir. Por mucho turismo que hay en la zona, me da que todavía hay poca información sobre este tipo de senderos y recorridos, así que ojalá que la narración de esta excursión pueda servirles a algunos.


Foto bonita en la parte más baja del sendero, y foto final de recorrido donde Josema había dejado su coche.


Una buena cerveza para reponer los líquidos del equipo bajo los últimos rayos del sol en  una terraza de L'Albir:


Y regreso al punto de partida a recuperar el otro coche:


Momento que aprovechamos también para hacer otra foto bonita de Benidorm con la luz horizontal del sol: