sábado, 13 de septiembre de 2008

26. EL FELDBERG, 1.493 m, (6k 250+) Selva Negra, Alemania.



¿Vale la pena contar la historia de la ascensión a un monte en un día de niebla en el que no se ve absolutamente nada? Bueno, hay algunas excursiones hechas en esas condiciones que ya he contado, como la vuelta al Midi d´Ossau (v Montes 8), o alguna otra que otro día contaré, como la del Ohry, o una al San Lorenzo en la que no sabíamos hacia donde bajar. Pero ¿vale la pena si la excursión es a un monte al que suben cientos de miles de personas al año y al que se llega a la cumbre por ¡un caminito asfaltado!? Pues hombre, ya que es el punto más alto de la Selva Negra y que la ilusión del día anterior es como la de cualquier otro día previo a subir al monte, pues no le vamos a negar el derecho a estar en este blog; y más que nada por lo original que resulta que la única vista general de la excursión es la del cartel que fotografié a mitad de camino.

La cumbre del Feldberg es un largo lomo herboso tan suave que la verdad es que invita a recorrerlo aunque sea subiendo con el teleférico. Supongo que lo bonito debe de ser subirlo desde Friburgo en una larguísima caminata, pero a falta de más información nosotros lo subimos desde la estación de esquí más próxima, eso sí, sin tomar el artilugio mecánico. La idea era subir cerca de sus pilonas para no perdernos, pero como los alemanes tienen las pistas de esquí protegidas con vallas tuvimos que dar con el sendero lateral que, por lo menos, tiene la virtud de arrancar entre vegetación de bosque. El altímetro marcaba 1.245 mts en la salida y los carteles decían que hasta la cumbre había 2,8 kms, así que eso es lo que hicimos: unos 250 mts de desnivel. Con el fresquito de la niebla y el viento lateral que pegaba, mi colega puso la directa y en 50 minutos estábamos en la cima.

La suerte que tuvimos es que con lo pronto que era y la niebla que había, en el teleférico no subía nadie. Estar solos en la cima del Feldberg debe ser toda una hazaña. Y es que si en el cartel de la panorámicas dice que a la cima del Zugspitze (el pico más alto de Alemania, 2.960 m) suben unas 700.000 personas al año (en el teleférico, claro), a la del Feldberg no quiero ni imaginarlo. Cuando regresamos a almorzar en el coche (único sitio protegido de la pegajosa neblina) una caravana continua de coches llegaba a los pies del teleférico y se daba media vuelta.

Bueno, pues estas son las fotos de la excursión.
1) mi colega en el primer tramo de subida:



2) llegando a la altura de las últimas pilonas del teleférico:


3) la antena cercana de la cumbre que está llena de carteles que dicen Halt, Verboten y esas cosas tan agradables de ver en el monte:


4) yo en la cumbre con el pelo como un repollo:



y 5) mi colega bajando por el caminito asfaltado que hay entre la cumbre y el final del teleférico:


Ah, y en cuanto a las incomparables vistas que se tienen mirando hacia el Sur, desde tan gozoso paseo, estas dicen los carteles que son (de Este a Oeste):




La fecha de la excursión: 3 de agosto del 2008.

Y un consuelo final: es posible que la única forma de que algunos montes puedan aún parecer montes sea subirlos con niebla.